A partir de información oída y leída en medios locales, surge este análisis con la esperanza de echar una mirada distinta a la propia de una simple y rápida lectura.
CUESTIÓN POLICIAL.
En entrevista efectuada en el programa La Locomotora de Radio Universidad San Luis, el Ministro de Seguridad y Relaciones Institucionales, Dr. Martín Olivero se refirió a los reclamos salariales efectuados por el personal policial.
Como sentando la posición gubernamental, señaló en primer lugar que entiende que la Policía “está bien paga”. Para luego demostrar sus confusas ideas diciendo que “uno siempre quiere ganar más” y ” no digo que 4000 pesos sea mucho, pero tienen los adicionales”.
Los que saben algo de las necesidades de la población y de las características del trabajo policial, tienen en claro que los adicionales en días francos, se traducen en policías cansados y con desapego familiar. Se espera que un Ministro de Seguridad esté en conocimiento de esto y que tenga la vocación y la capacidad de resolverlo, no de eludir o ahondar el problema. Tras la insistencia periodística, terminó por reconocer que “puede ser que estén cobrando poco”. Lo que no deja de ser un paso adelante. La cuestión a dilucidar es si hay intención de seguir avanzando, en resolver lo que reconoce.
Finalmente el Ministro expresó conceptos que son los que merecen mayor atención a mi juicio. Dijo que en materia de salarios policiales en San Luis” estamos en la media nacional, no somos la peor paga…”
Palabras que evidencia una actitud conformista como para calmar las aguas “estamos en la media”, como si con esta frase se estuviese resolviendo el reclamo. El primer argumento que surge es aquel de “mal de muchos, consuelo de tontos”.Por otra parte, se advierte una contradicción flagrante y de larga data en estos casi 30 años de gobierno feudal familiar.
Venimos escuchando reiteradamente que San Luis ocupa el primer lugar en autopistas, las que además están iluminadas; también primero en consumo de cemento, de energía eléctrica, en construcción de diques, de casas, etc. Lo cual es cierto, no cabe la necedad de negar realidades “a priori”.
Lo contradictorio es que un gobierno que se regodea con ocupar los primeros lugares en lo material, se conforma con andar en la media o con no ser la peor en lo concerniente a salarios, a condiciones de trabajo de todo su personal.
Este es un gobierno de la materia, del cemento, de los ladrillos, del asfalto, los cables y las compus; no el gobierno que promueva la dignidad de las personas, que atienda y resuelva las cuestiones humanas, empezando siempre por cierto, con su propio personal.
Puede ser que esté en la media nacional en cuanto a salarios policiales, también en los salarios docentes para un único cargo. Pero estamos en el peor lugar para el pago del segundo cargo docente y bastante abajo en la remuneración de empleados públicos. Estamos mal también en la cobertura de todas las especialidades médicas en la salud pública. También sabemos que en todos los campos del empleo estatal en San Luis hay mucha precariedad laboral: sobran contratos, pasantías, planes asistenciales. En algunos casos llevando ya muchos años.
El Ministro dice que puede ser que los policías cobren poco, abriga dudas, no sabe, no se anima.
Otros, tenemos la certeza, la lamentable certeza de la necesidad de todos los empleados estatales de crecer económica y socialmente, personal y familiarmente y de que esa necesidad tan humana, no es tenida en cuenta por este gobierno. La posterga, la abandona, no la atiende, no le interesa. Lo humano pierde ante la obra pública porque ésta se ve fácilmente y porque es, en el mundo entero, la forma más segura y rápida de obtener retornos.
Adolfo y Alberto Rodríguez Saá son los maestros en esta política. Los actuales gobernantes sehan formado en esa escuela y si se les ocurriera incurrir en políticas de promoción humana, no tienen la menor capacidad autónoma para decidir y producir esos cambios.
VIAJE A AUSTRALIA
Durante varios días una nutrida delegación sanluiseña visitó Australia despertando dudas acerca de la pertinencia de este viaje y más aún, con algunas presencias en esa delegación.
El objetivo más señalado de este viaje es el de tomar conocimiento de la forma de producir en zonas áridas como las propias de nuestro oeste sanluiseño.
Y aquí se le ven “las patas a la sota”.
Es muy sabido que la familia Rodríguez Saá, en forma personal o a través de sus varias empresas han adquirido grandes extensiones de campo en el oeste, especialmente en las zonas beneficiadas por los diques y acueductos, construidos o proyectados. No en vano el gobierno de Adolfo RS nunca hizo público el estudio de aguas subterráneas efectuado en toda nuestra provincia por científicos australianos. Sobre este estudio que orienta dónde hay agua subterránea; se agrega ahora el conocimiento de cómo encarar la producción, logrado en una visita pagada totalmente por el pueblo de San Luis. Quizás aquí está la razón de la presencia en esa delegación del Dr. Sergnese, figura clave para la “legalidad” en la construcción del feudo provincial.
Las dudas que inicialmente plantean estos dos temas, sólo buscan disimular las certezas de quienes conocemos el paño del feudo que nos gobierna.
Son certezas de que lo humano es relegado, que se impone el negocio fácil en lo material y que uno de los grandes objetivos finales, es el permanente e insaciable enriquecimiento de la familia Rodríguez Saá y de sus laderos.
SAN LUIS. Setiembre 4 de 2013