El Gobernador de la Provincia Claudio Poggi firmó un Decreto que más tarde y en trámite urgente se convirtió en ley, prohibiendo la existencia de wiskerias y todo tipo de locales en los que se ejerza o favorezca la prostitución.

Era hora y cabe aplaudir una medida así; que no debe ser la única ni la última; sino la primera de un conjunto de políticas activas para desbaratar toda forma de prostitución, la que no es sino uno de los fracasos de nuestra sociedad humana.

El oportunismo.

Recién tras el fallo absolutorio en el juicio de la causa por Marita Verón  y la lógica bronca popular han aparecido los gobiernos preocupándose por el tema.

Poggi fue legislador nacional y provincial, ministro y  Jefe de Gabinete; cargos en los que  nunca dio muestras de interés por erradicar la prostitución.  Tampoco lo hicieron los gobernadores Adolfo y Alberto Rodríguez Sáa y Alicia Lemme; ni los intendentes, ni los legisladores provinciales.  Toda la gama de “piringundines” existen en San Luis desde hace años, pero parece que ninguno de los representantes del pueblo  los vio nunca, o nunca supieron de su existencia n i de lo que ocurría puertas adentro de ellos.

 

Al kirchnerismo,  hoy mayoría en la Cámara de Diputados de la Nación, no se le ocurrió incluir la reforma de la ley de trata con media sanción de Senadores, para ser tratada y aprobada. La Presidenta recién ante la indignación popular llamó a extraordinarias para que se trate esa reforma, como finalmente se hizo aprobándosela.  No le cabe mérito alguno al oficialismo nacional por esta aprobación, porque no surgió de su propia voluntad (vaya uno a saber el porqué), sino que fue por la presión popular.

 

Nada han hecho los gobiernos de Tucumán y La Rioja, provincias con elevada actividad prostibularia y en donde se la vio a Marita Verón en su peregrinar por las  rutas de la explotación sexual. Como poco y nada hicieron  en su momento para ayudar en la investigación que hizo la mamá de Marita, Susana Trimarco.

Ahora  y para la foto con la Sra. Trimarco (candidateada al premio Nobel) aparece Alperovich, dándoselas de solidario. Lo que no borra su amistad con la “Chancha Alé” largamente reconocido en Tucumán por su actividad en estos dolorosos temas.

Tampoco  los  gobiernos de Santa Cruz hicieron nada para frenar la intensa actividad de explotación sexual que reina en ese provincia. Sin olvidarnos por cierto que Néstor Kirchner cuando fue Intendente de Río Gallegos fue el autor de la idea de reunir todos los prostíbulos en un mismo barrio -Las Casitas- en donde hasta contaron con ventajas impositivas.  En sus muchos escritos Osvaldo Bayer supo decir que el abuelo paterno de Kirchner se dedicaba en su época a regentear prostíbulos y a la usura prestamista.

Ahora parece ser el momento de las fotos con Susana Trimarco, de las solidaridades, de las prohibiciones. Claro, el problema les estalló en las manos. No todos los gobernantes y legisladores son culpables, algunos hicieron algo. Pero muchos más son los que favorecieron, los que encubrieron. Y más aún, los que callaron mirando para otro lado.

Para que exista la prostitución y la trata de personas se necesitan no sólo los clientes, sino  los explotadores y la ceguera o inacción  policial y hasta la judicial o gubernamental.

En el reciente juicio por la muerte de Guadalupe Di Falco, quedó claro que su mamá Débora, mientras era obligada a ejercer la  prostitución como menor de edad había tenido relaciones con una persona mayor, que  declaró en el juicio. Y siendo así reconocida esta persona y claro su testimonio, no se ha  aconsejado  se le  abra causa por estupro.

La prostitución es el fracaso de la sociedad, a la que convierte en  sorda, ciega y muda.  Los que tienen responsabilidades para frenarla, castigarla, hacerla desaparecer sólo actúan cuando no les queda otra, cuando hay casos flagrantes y dolorosos. No han demostrado vocación para actuar por propia decisión.

Es que en este momento de la vida política impera el tener, el hacer. Porque teniendo “se es más”, porque haciendo obra pública se obtienen retornos y  votos.  La deuda de estos gobiernos nuestros además de serlo en honestidad, lo es en humanismo; porque con su abandónica propuesta en materia de prostitución, de educación y de salud demuestran que no saben y no les interesa saber de la dignidad de la persona  humana.

Aún cuando estas acciones nos huelan a oportunistas, bienvenidas sean y que de una buena vez sirvan para dejar atrás esta triste realidad de explotación.

Un caso en San Luis

En la localidad de La Toma, capital del depto. Cnel.Pringles en el año 2008,  y con veloz paso por comisiones y en medio de feriados, se promulgó la Ord. 510-08 por la que se permitía la habilitación de wisquerías, boites, etc en el radio urbano de la localidad. Esta aprobación contó con la firme y tenaz oposición del entonces concejal por la Democracia Cristiana Juan Eduardo Silvera.

Que esta ordenanza era la puerta abierta a la prostitución, lo asegura el texto de una nota publicada por aquellos días en El Diario de la República al comentarla. El periodista puso en  boca de los concejales que la aprobaron  expresiones en el sentido de la necesidad de cuidar de la salud de quienes ejercerán el trabajo de alternadoras y de prevenir el contagio del HIV SIDA y de enfermedades venéreas en la localidad; expresiones que son  un reconocimiento de la verdadera  realidad de estos locales. Y de la vocación pro prostitución de esos concejales y de la Intendenta que no la vetó y si la promulgó.

El único fundamento de esta ordenanza expresaba “Que la realidad social de una ciudad en pleno crecimiento, hace imprescindible legislar y contemplar las distintas situaciones que se derivan de la actividad de los locales precedentemente enunciados”.  El proyecto venía empujado por los cafishos de la zona que querían mayor protección a cambio de pagar impuestos.

El concejal Silvera presentó un proyecto de Ordenanza para derogar la 510-08, en el cual y al final de sus argumentos, afirmaba:

“ El nudo de este tema está en la respuesta que nos demos a esta pregunta:

*  ¿Queremos mujeres explotadas sexualmente que estén limpias y sanas; o no queremos que existan mujeres explotadas sexualmente?

Para este Bloque de la Democracia Cristiana no caben dudas:

No debe abrirse la puerta a la prostitución, bajo ninguna forma o excusa.

Al contrario, deberíamos saludar y felicitar la tarea de la Sra. Trimarco y sumar nuestro esfuerzo al de ella.

Por lo expuesto la Democracia  Cristiana entiende que la Ord. 510/08 ha surgido de una evaluación incompleta y equivocada del tema, por lo que corresponde su total y definitiva derogación a través de la aprobación de un proyecto como el que se presenta.”

Por cierto que este proyecto del democristiano Silvera no fue tratado, pese a contar con la adhesión de muchos vecinos por medio de firmas reunidas desde laicos de la localidad y el lamentable silencio de gobierno, legisladores provinciales e instituciones.

Las denuncias hechas ante los medios contaron con escasa repercusión en la provincia y algo en medios nacionales.

La Intendente Municipal de La Toma  en ese momento, la hoy senadora provincial Dominga Torres, demoró su aplicación.

Meses más tarde y como quien no sabe nada de nada y legisla pensando en el Bien Común, los concejales oficialistas (PJ) aprobaron la Ord. 520-08, por la que se prohíben en el éjido urbano las wisquerías, boites, etc.  Sin decir una palabra sobre la anterior ordenanza aprobada por ellos, sin derogarla.

Para ellos, nada ocurrió nunca y con este Ord. 520 dejaban expresada su post ura en contra de la explotación sexual de las mujeres.

Mucho menos se les ocurrió mencionar o reconocer al concejal Silvera su firme postura, que nunca claudicó pese a todo lo que se dijo y ocurrió.

La hoy Senadora Dominga Torres levantó pronta y obediente su mano para aprobar la ley propuesta por Poggi, seguramente queriendo borrar de su vida el momento en que promulgó una ordenanza que favorecía  lo que ahora prohíbe. Y habrá deseado fuertemente que nadie sepa o recuerdo ese episodio, que muestra la endeblez de las convicciones de nuestros representantes.

Para algunos la lucha contra la prostitución y la trata surge de lo más profundo de sus convicciones; mientras que para otros es un tema coyuntural ligado a conveniencias electorales.

SAN LUIS. Diciembre 20 de 2012.