¿HABRÁ FRAUDE OTRA VEZ?

Como ocurre en cada año electoral vuelve a hablarse del posible futuro fraude.Mientras unos lo dan por cierto, para otros son sólo excusas para esconder derrotas.Desde los comienzos de nuestra democracia se habla de fraude. Hasta se lo llegó a  calificar de “fraude patriótico”  cuando durante  la Década Infame,  se lo practicó abierta y alevosamente “para salvar a la Patria de la voluntad de las masas no preparadas para elegir”. Así, el Gobierno surgido del primer golpe de estado en nuestra vida constitucional, se creía obligado a falsear los resultados electorales porque, decían, “el pueblo ignorante era capaz de votar contra sus intereses”.

De ahí en más, el fraude electoral ha sido una dolorosa y constante realidad en nuestra política.  Su intensidad va en relación directa con proyectos totalitarios,  corruptos e inútiles.

A lo largo de los años, el fraude electoral en Argentina ha mostrado múltiples expresiones desde las más sencillas hasta las científicas. Abarca no sólo a lo que ocurre en el día de votación; el fraude se construye todos los días. En los últimos años y quizás para mayor seguridad en el logro de sus objetivos, coexisten en una misma elección casi todas las formas fraudulentas conocidas.

El fraude es ejecutado casi exclusivamente desde los aparatos estatales, porque se requiere la impunidad que otorga el control de la fuerza pública y  una fuerte influencia sobre la justicia, cuando no su control absoluto.

En todos los casos, quienes lo sufren, pueblo y “oposición”,  quedan  en la mayor indefensión.

En todos los casos quien más pierde es la forma democrática representativa, republicana y federal que nos marca la Constitución Nacional.

Veamos si es posible alguna forma de ordenar las distintas expresiones que se han visto en materia de fraude electoral a lo largo de los años.

1* FRAUDE  ARTESANAL.

Son las prácticas más antiguas y sencillas.

a) La no inclusión de votos de algunos partidos en cada urna (lo que ocurre en la misma justicia electoral) y que nunca perjudica al partido gobernante.b) El robo o destrucción de votos en el cuarto oscuro. c) El cambio de votos por otros con errores en la confección buscando su anulación. d) El voto cadena.e) El voto marcado.

2* FRAUDE OPRESIVO.

Es aquel en que el gobierno usa su fuerza para imponer el voto.

a) Determinados grupos de votantes son concentrados en lugares amplios desde el día anterior y tras  festejos y bebidas son llevados al comicio con el voto dentro de un sobre oficial. b) Apropiarse del documento de personas o grupos, para que un puntero  vote en su lugar en plena connivencia con las autoridades de mesa. c)  El “copamiento” del centro de votación por parte del oficialismo, generalmente por el responsable de la zona, con varios punteros más y equipo informático. Se instalan a la vista de todos y manejan fiscales, controlan quiénes vienen, quiénes faltan, recuerdan favores y promesas, etc.

Si bien algunas de estas modalidades parecen de otras latitudes y épocas, recordemos nada más las denuncias que hacen nuestros pueblos originarios.

3* FRAUDE INSTITUCIONAL.

Lo realiza el gobierno creyéndose con pleno derecho a usar el  presupuesto y el aparato estatal. Parte de la persistente confusión entre Estado y Gobierno y entre Gobierno y Partido.

a) La cartelería en obra pública, edificios y vehículos oficiales personalizando el nombre del gobernante de turno.El pueblo paga así con sus impuestos, la campaña de instalación de una persona, la que  aprovechará esa publicidad gratuita para sostener, avalar o imponer sus candidatos. Son pocos los que no caen en esta práctica. b) Es frecuente que un funcionario sea candidato y siga gozando de las prerrogativas de su cargo, sin renunciarni pedir licencia. Asiste aactos oficiales convirtiéndolos en partidarios, con vehículos oficiales, sueldo y viáticos,etc. Caben también aquí los legisladores, oficialistas o no, que faltando a sus obligaciones parlamentarias, hacen sus campañas sin sufrir descuentos en sus dietas por inasistencias y hasta cobrando viáticos.  Son múltiples las denuncias periodísticas de esta práctica en cada elección. Pero hay siempre unas pocas y honrosas excepciones. c) Las inauguraciones de obras, giras de trabajo o institucionales,  incluso en el corto período de veda que para estas acciones señala la legislación. d) Desvío de fondos para pagar gastos de campaña, uso de vehículos oficiales y empleados públicos, etc. d) La protección policial a la publicidad de los candidatos oficialistas y a quienes la instalan: paralela a cubrir a quienes destruyen la de la oposición, cuando no la directa detención y agresión a activistas opositores. e) Los gobiernos suelen asignar zonas a cada funcionario para que las conozca a fondo, las recorra, usando la informática oficial para hacer listados varios  usados el día de la elección para controlar quiénes han votado o no. Son los responsables de los centros de votación de esa zona y de operaciones como la cadena y  el robo o cambio de votos. f) El uso de los medios de comunicación social propiedad del Estado, para favorecer ampliamente a  los candidatos oficialistas, con periodistas (?) duchos en eso de favorecer propios y ningunear ajenos. g) La designación como autoridades de mesa de personas fuertemente ligadas al partido gobernante, preparadas para asegurar el éxito del fraude que allí se aplique. Por ejemplo,  en San Luis son contados los casos de mesas con problemas por falta de autoridades. Todas cumplen su tarea a tiempo porque de ello depende presente y futuro de esas autoridades de comicio.

4* FRAUDE  LEGAL

Incluye al que se hace mediante legislación o con la documentación empleada.

a) Las viejas proscripciones a partidos, siendo históricamente el más perjudicado el PJ. b) El manejo de los padrones suele alcanzar dimensiones y formas increíbles. La  rotación de grupos de personas de una localidad a otra,  permiten dar vuelta elecciones con facilidad allí donde hay pocos votantes. c) La inclusión de ciudadanos de provincias limítrofes. Un caso emblemático en San Luis, es el de la localidad de Alto Pencoso con un padrón electoral tres o cuatro veces mayor que su poblaciónreal. c) Los numerosos casosde documentos de identidad mellizos, lo que abre una amplia posibilidad de engaños. d) Los nuevos DNI constan de libreta (celeste) y tarjeta; en éstas una leyenda dice”No válido para votar”. Sin embargo  autoridades electorales nacionales están diciendo que sí serán aceptadas para sufragar. Lo que abre la posibilidad de un voto con cada tipo de documento. Así lo supo hacer en San Luis el ex senador nacional Ochoa, quien tuvo condena definitiva de la justicia, cuando terminó su mandato. e) El silencio de la justicia o su intervención tardía, ante las frecuentes violaciones a la veda electoral y ante las denuncias que se efectúan.

5* EL FRAUDE DELICTIVO.

Si bien todos los casos de fraude constituyen una violación a la legislación, en un delito;  en este grupo se incluyen aquellos que se comenten sin la menor intención de cuidar las formas. a) Patoterismo de autoridades de mesa, que no reconocen la función de fiscales generales a quienes incluso, amenazan con hacerlos detener.  b) La entrega de sobres ya firmados  a los punteros oficialistas para que organicen el “fraude cadena”. c) El robo o destrucción de urnas. d)  La introducción de datos erróneos en las actas de escrutinio y en el telegrama con esos datos. e) El “cargar” los datos de cada urna erróneamente en el sistema de cómputo final. f)  Agregar en la urna y tras el escrutinio  provisorio  documentación que dificulte o impida la verificación eneldefinitivo.

6* EL FRAUDE TECNOLOGICO.

Son las formas más nuevas y más difíciles de resolver, fruto del avance de la informática. Si en muchas de las formas antes descriptas una buena fiscalización puede actuar y resolver, en las tecnológicas no existe al momento forma alguna de fiscalizar; de ahí justamente el interés gubernamental por desarrollarlas al máximo.

El proceder más denunciado  es el que surge del programa (software) que a medida que recibe y suma la información, la  convierte a cantidades y porcentajes predeterminados y favorables al gobierno. Aquí y ahora no existe ninguna posibilidad de conocer el programa ni de auditarlo mientras se lo usa. Desde hace años en Argentina el software lo diseña y aplica la empresa INDRA SA, la que viene acumulando denuncias por maniobras de este tipo en todos los países en que actuó.

Hay quienes proponen al voto electrónico como solución. Afirmación que no es válida, el electrónico sólo garantiza rapidez en el conteo. Este tema merece una nota especial en breve.

A MODO DE CIERRE.

Todas estas maniobras fraudulentas  se siguen dando, aisladas o  en “combos”.

Todas, expresan de modo categórico la total falta de ética, de valores democráticos, de irrespeto a la república y a cada uno de los argentinos; a sus ideas, a sus derechos,  a su dignidad personal. Y a nuestra  dignidad nacional.

Más corrupción, más incapacidad de gobernar, mayores niveles de fraude. Éste duele profundamente a quienes ven cómo se lastima el espíritu de los padres de la Patria y de los pro hombres de esta democracia nuestra. Duele por la impotencia al ver arrolladas por el peso del poder y del dinero, las mejores intenciones de dar lucha por ideas e ideales. Duele el ver cómo jóvenes que ingresan a la política afirman con total seguridad, que así  es la política, que sus cargos en el estado nacional, provincial o municipal son para  asegurar como sea el triunfo del “proyecto”.

¿Habrá fraude en este 2013? Seguro que sí y hasta quizás descubramos alguna nueva forma.

Ante esa realidad ¿hay que participar como partido, como candidato, como ciudadano?

Sí, porque la peor pelea es la que no se da. Porque no hay que dejar campo orégano a los delincuentes que prostituyen la democracia. Porque sólo el conocimiento, la participación y la persistencia en los valores morales y democráticos nos permitirá acabar con lo que nos daña. Es tarea de todos, no caben ni  la indiferencia ni el derrotismo.

Es difícil,  pero reconforta el saber que siempre hay quienes están dispuestos a denunciar, proponer, transmitir y dar buena pelea para que la Patria no sea un botín de guerra tomada por asalto por una horda invasora. Es necesario cerrar filas republicanas y democráticas para desterrar la delincuencia política en cualquiera de sus formas.

Quizás deberíamos hacer propias y llevar a la práctica diaria,  las palabras que supo expresar allá por 1918 Joaquín V. González:

¡Trabajo va a tener el enemigo para desalojarme a mí del campo de batalla!

SAN LUIS. Julio 8 de 2013